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El sistema digestivo de nuestros bebés al igual que el resto del cuerpo tiene su propio proceso de maduración. Es por ello que hay alimentos que nuestro hijo no debería comer hasta que su cuerpo este preparado para digerirlos de forma correcta, y otros que también quedan prohibidos por la posibilidad de que puedan atragantarse y provocar ahogamiento.

 Durante los primeros 12 meses, el alimento principal es la leche. La Organización Mundial de la Salud recomienda la lactancia de manera exclusiva durante los seis primeros meses de edad. A partir de este momento, nuestro peque necesita ir incorporando nuevos nutrientes, por lo que según nos lo vaya indicando nuestro pediatra es cuando podremos ir introduciendo nuevos alimentos y texturas. Aquí os ampliamos información.

Una correcta nutrición durante sus primeros años de vida será fundamental para su salud el resto de su vida.

A continuación os detallamos que alimentos no debes incorporar durante su primer año de vida y por qué.

1.Sal

No se recomienda añadir sal adicional a las  comidas en los primeros meses de vida.  Durante esta época es suficiente con la que aportan ya de por si los alimentos.

La sal en exceso no es buena, ni durante la infancia ni durante la madurez. Pero en caso de nuestros bebés, un alto exceso de sal durante su desarrollo, puede producir problemas futuros como la hipertensión o dañar sus riñones.

Tampoco son recomendables alimentos en conserva o pastillas de caldo por su alto contenido en sal necesaria para alargar su caducidad.

La sal es buena, siempre y cuando sea en su justa medida.

2.Frutos secos

Los frutos secos no son recomendados, no solo durante el primer año de vida, si no hasta los cinco o seis años de edad.  ¿Por qué?  Son la causa más frecuente de atragantamiento infantil. ¡Mucha precaución! Además los cacahuetes, nueces, almendras… son alimentos muy alergénicos. 

3.Miel

La miel puede contener la bacteria responsable de transmitir el botulismo, que puede causar serios problemas. Es por ello que no es aconsejable dar miel a niños menores a un año, ya que puede producir toxinas en su intestino, que aún esta en desarrollo. Cuando este ya haya madurado no habrá ningún problema en combatir a esta bacteria.

Tampoco es recomendable porque podría sufrir alergia al polen.

4.Desnatados

Lo más importante para nosotros es que nuestros hijos crezcan sanos y fuertes. Por esto mismo los productos como leche, yogur, quesos… no deben ser desnatados y los deben tomar en pequeñas cantidades. Nuestro cuerpo, y sobretodo el de nuestro bebé necesita grasas, una fuente de calorías que favorece el crecimiento.

Tampoco te recomendamos la leche de vaca durante el primer año de vida por su gran aporte de proteínas.  A partir de los 12 meses la puede tomar, pero entera.

5.Pescados grandes

Grandes pescados como por ejemplo el pez espada, tiburón, lucio o el atún rojo contienen gran cantidad de mercurio. Este metal puede ser tóxico y afectar el correcto desarrollo del sistema nervioso de los niños. Debemos evitar este tipo de pescados hasta los tres años de edad. Tampoco es recomendable el marisco hasta los dos años.

El pescado blanco es más apropiado en esta etapa.

6.Alimentos poco hechos o crudos

Alimentos como los huevos, carne o pescado crudos o poco hechos pueden crear graves infecciones como el anisakis o salmonelosis entre otros. Por lo que estos alimentos durante este periodo mejor bien hechitos.

7.Caza

La carne de caza puede contener plomo, por lo que no se deben consumir hasta al menos los 6 años de edad. El plomo puede ocasionar problemas renales y afectar al desarrollo intelectual. Tampoco se recomienda tomar este tipo de alimentos durante el embarazo.

8.Azúcar

El exceso de azúcar en los niños puede provocar sobrepeso infantil, caries y demás problemas dentales e incluso diabetes.  Esto es debido a que los azúcares aportan tanta energía inmediata que la insulina puede sufrir caídas poco saludables para el cuerpo de un niño.  No se recomienda añadir azúcar a los alimentos hasta los 2 años de edad.

9.Bollería industrial

La bollería industrial se caracteriza por su alto contenido en grasas trans, perjudiciales para la salud. Además suelen contener aceites como los de palma o coco, poco saludables.

Por lo que te recomendamos que si quieres dar algún bollito a tu peque, hazlo casero o fíjate en que los ingredientes sean lo más sano posible.

10.Gominolas

Las chucherías tienen una gran cantidad de azúcares, goma y colorantes, no recomendado en estas edades.  La gran cantidad de calorías vacías que aportan pueden provocar obesidad infantil y el exceso de azúcar tal y como hemos comentado anteriormente favorece la aparición de problemas dentales como las caries.

11.Refrescos

No hay mejor bebida para un niño que el agua. Los refrescos contienen exceso de azúcar, que ya hemos visto anteriormente lo contraindicado que esta en exceso. No contienen ningún nutriente y pueden provocar que el peque se llene y luego no quiera comer otras cosas que le aportan los nutrientes y vitaminas que necesita para su crecimiento.

Por supuesto no hay que decir que las bebidas con cafeína quedan completamente prohibidas. En niños producen irritabilidad e hiperactividad.

12.Espinacas o acelgas

Las espinacas y las acelgas, a pesar de contener gran cantidad de vitaminas y minerales imprescindibles para el desarrollo, contienen  también nitritos. Este exceso de nitritos en peques menores a 12 meses puede ocasionar matahemoglobina, que produce dificultad para respirar por la falta de oxígeno en sangre. Por lo que debemos buscar el aporte de vitaminas y nutrientes en otro tipo de verduras.

Las espinacas y las acelgas, a pesar de contener gran cantidad de vitaminas y minerales imprescindibles para el desarrollo, contienen  también nitritos. Este exceso de nitritos en peques menores a 12 meses puede ocasionar matahemoglobina, que produce dificultad para respirar por la falta de oxígeno en sangre. Por lo que debemos buscar el aporte de vitaminas y nutrientes en otro tipo de verduras.

Dieta sana y equilibrada

Tras esta pequeña guía hay que ser prudentes y seguir las indicaciones del pediatra. Poco a poco su aparato digestivo se irá preparando para ir descubriendo nuevos sabores y texturas en su paladar. Hay que esperar el momento adecuado para ir dándole nuevos alimentos.

Una dieta equilibrada y unos hábitos alimentarios saludables desde pequeñito, beneficiaran a nuestro hijo durante su desarrollo y en su madurez: crecerán sanos y se harán más fuertes.

¿Tienes algún truco para ir introduciendo nuevos alimentos a tu bebé? ¡Cuéntanos!

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

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