Disfruta de los mejores momentos con tu bebé.
En Bebépolis, sabemos que el juego y la estimulación de nuestros tu bebé es fundamental para que crezca feliz y sano, porque se desarrollará de manera correcta y comenzará a conocer el mundo que le rodea.
Con los materiales adecuados, le ayudaremos a potenciar valores positivos y compartiremos horas de entretenimiento y diversión.
Nuestras marcas estrella de juego y estimulación para tu bebé son Tiny Love y Maxi-Cosi.
Podemos estimular a nuestro bebé de 3 a 6 meses con actividades para potenciar su desarrollo psicomotor. ¿Cómo? Entre los 3 y 6 meses, nuestro bebé ya puede sostener la cabeza cuando lo cogemos y si lo dejamos boca abajo se apoyará sobre los antebrazos, levanta el tórax y aguantando la cabecita.
Entre el 3er y el 4º comienza la actividad lúdica del bebé, cuando se interesa por jugar y explorar. Disfruta jugando él solo y también disfruta mucho jugando con un adulto. Comenzará a mover las manos y tendrá fuerza para coger juguetes por voluntad propia. También será capaz de realizar otras actividades, como seguir un objeto con la mirada o girar la cabeza al oír un sonido. Suelen mover la cabeza hacia donde se produce el ruido y comienzan a entretenerse mirándose las manos y moviéndolas.
Es aquí cuando desarrollan la visión en perspectiva, percibiendo la profundidad diferenciando entre colores. En esta etapa, el bebé busca el contacto social y muestra interés por los objetos y las personas. También comenzará a desarrollar la risa con ruido y el balbuceo.
A partir de los 4 meses, cuando el bebé está tumbado, será capaz de desplazar su cabecita con el tronco. Se puede mantener sentado durante bastante rato. Si colocamos un objeto cerca del bebé también será capaz de cogerlo de forma voluntaria y llevárselo a la boca.
La curiosidad se convertirá en un motor que potenciará su desarrollo.
Estimula a tu bebé de los 3 a los 6 meses.
- Házle caricias y cosquillas en zonas sensibles como la cara, las palmas de las manos, las plantas de los pies y la columna vertebral.
- Ponle en la mano objetos de fácil presión y de distintas texturas para estimular su capacidad de coger objetos y de explorarlos.
- Atrae su atención con un objeto vistosos y sonoro.
- Cógelo en brazos para estimular que aguante su cabecita.
- Háblale mientras le mueves lentamente las diferentes partes del cuerpo.